This is the dawning of the rest of our lives

martes, 7 de junio de 2011

Call me bipolar, it's ok.-

Que dia tan raro hoy; me comporte como una autentica bipolar. Pase de la felicidad desbordante que me caracteriza este año al borde de las lagrimas en... ¿minutos?
Cada dia entiendo menos a la gente y me sorprenden mas. Son giladas, pavadas, estupideces taradíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimas. Pero son los fantasmas del pasado los que me aterran. Es como si le acercaras un indefenso pollito a alguien que le tiene fobia a las aves. Se que en danza estoy fallando todo el dia, y me gustaria poder algun dia bailar sin ataduras; pero a veces (lease mas de la mitad) me agarra panico la mirada de otros que saben. No estaba hablando de eso no? No, no se como termine con danza.
El punto es que pelotudeces taaan idiotas me llevan al punto de la depresion profundisima, a la inflexion, cuando queiro decir basta y ando por los pasillos con los ojos llenos de lagrimas intentando que nadie me vea la cara y solo quiero irme a casa para cortarme las venas. De verdad, es como si quisiera dejar pruebas fisicas de todo el dolor que siento, del horrible magnetismo que tengo para ciertas cosas inexplicables. Despues seguramente encuentre algo que me devuelva la felicidad;
y en momentos como este, cuando me miro al espejo y descubro esa sonrisita maléfica característica; y una pared de cemento se construye entre mis sentimientos y la gente. Alejo a todo el mundo, porque estoy cansada de sus palabras vacías, y los convenzo - o creo convencerlos de que todo está bien-. Esa sonrisa partida, que no olvida.
Si, le tengo miedo a los fantasmas, ellos nunca parecen irse. Es mas el miedo de que aparezcan que los hechos en realidad, y por eso sufro tanto. Porque no me rehuso a las penas de la vida normal, me rehuso a que el pasado me condene, a que me persiga, me rehuso a sufrir por lo mismo una y otra vez. Ya basta. Nada va a arrebatarme la alegria. Soy feliz conmigo.

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