This is the dawning of the rest of our lives

miércoles, 3 de marzo de 2010

Edward

Sueños como este deben repetirse en miles de chicas como yo. Un sueño en el que todo es tan perfecto, y yo lo conocía y el me amaba. Nada estaba fuera de su lugar, salvo que yo estaba en mi posición negadora y lo había rechazado más de una vez, pero que mas daba? Estaba ahí, era perfecto, hermoso y millonario -no es importante para mi pero recuerdo que lo era- y lo tenia solo para mi, yo era todo para él. Aún siento que fue verdad y me resulta imposible no conocerlo, recuerdo cada faccion de él, que se convertía en mi vida, y no había nada más. Supongo que es la utopía de toda mujer, del hombre perfecto, ese que nos ame siempre y sin importar qué, ese que sea precisamente como lo soñamos siempre. Ese que una vez una tal Stephenie meyer se animó a caracterizar y al que Rob Pattinson le puso piel y voz. Es tan extraño que no sé como describirlo, desearía que estuviera aquí, a veces -siempre- lo necesito tanto, alguien como él. No way, ¿es que no hay ningún hombre dispuesto a amarnos correctamente?

No hay comentarios: